Gotham City, 1949. James Gordon es un detective privado alcohólico, venido a menos y con serios problemas familiares. Su vida es un desastre, pero aún puede empeorar, porque está a punto de convertirse en el principal sospechoso del asesinato de una mujer que él debía proteger. Solo Batman y su propia pericia pueden sacarle de este embrollo. Desgraciadamente, es posible que el primero sea una alucinación y la segunda... ¿cuánto hace que la perdió?
El tándem Brubaker/Phillips realizaron esta obra primeriza en el año 2001, título hasta ahora inédito en España, pero que gracias a la labor de la editorial ECC que está recuperando viejos títulos de Batman, podemos disfrutar de ella en un tomo en rústica que incluye un par de textos introductorios que nos ayudan a contextualizar la historia.
Una vez leída esta Gotham Noir queda patente que ésta les sirvió a la pareja de autores como un entrenamiento básico para poder ofrecer en el futuro otras obras de mayor envergadura y que tantos éxitos han cosechado en los últimos años (Gotham Central, Sleeper, Criminal...).
Lo primero que llama la atención de este título es la incorporación de Batman como personaje secundario, dejando al alcohólico Comisario Gordon el gran peso durante la narración, y en la que tendrá que encontrarse a sí mismo para poder resolver el embrollo en el cual está inmerso.
Otro de los detalles que habría que resaltar sería la caracterización que se nos ofrece de El Caballero Oscuro en este título: una sombra tenebrosa con una fuerte estética de cómic de terror que sorprenderá a más de un lector.
La historia que nos presenta Brubaker es una llena de clichés del género y lo que es más importante para servidor: ofrece un sorprendente cambio de roles de los personajes de toda la vida y adaptados para la ocasión, ofreciendo un título que, aunque mantiene el tipo durante toda la historia, podríamos decir también de ella que es un tanto predecible en su resolución final.
Respecto al apartado gráfico, tenemos a un Sean Phillips que se adapta de maravilla a la historia, con una espectacular narrativa donde prima por encima de todo ese contraste entre luces y sombras, asistido para la ocasión por la espléndida paleta de colores de Dave Stewart, dando como resultado un excelente acabado formal.
Como extra podemos encontrar una historia llamada "Ciudadano Wayne", homenaje a la célebre película de Orson Welles, escrita por Brian Michael Bendis y dibujada por Michael Gaydos, los cuales ofrecen una nueva y original vuelta de tuerca al concepto de Rosebud.
En definitiva, Batman: Gotham Noir es una obra amena e interesante con una gran estética ambientada en los años 40 y que recomiendo sobre todo a los amantes del género noir y a todos aquéllos que quieran leer nuevas y diferentes historias en las que está inmerso uno de nuestros personajes preferidos de la escudería DC.
