Ninth Ediciones nos ha traído este verano un cómic de género negro que, aún con una historia típica, nos deleita con una narración de lo más ágil y dinámica que he visto desde hace tiempo, acompañada por un arte expresionista que le viene como anillo al dedo a esta historia plagada de sangre y crudeza que busca llamar la atención desde un primer momento.
"Que caiga el que deba" o, dicho en su francés original, "Succombe qui doit". He de reconocer que nada más que el título ya me llamó la atención. Al buscar sobre él, volvió a captar mi atención su portada: ese amarillo chillón con el primer plano de un puño de boxeador ensangrentado y atravesado por clavos en los mismísimos nudillos. Por tercera vez, ojeando unas planchas aleatorias que encontré, su arte expresionista terminó de embaucarme por completo. Podría seguir enumerando todas las luces de este cómic, pero mi intención era simplemente la de hacer ver que este álbum está hecho para impresionar al intrépido lector que se acerca, atraído por estas "trampas" (en el buen sentido). En este arte, Ozanam es todo un experto: ¿Quién, en su sano juicio, no ha ojeado El Canto de los Sables (reseñado AQUÍ), La Sombra Blanca, Amargura o el próximo Temudjin (avanzado AQUÍ) y no le ha picado la curiosidad de indagar sobre los mismos?
En este caso, Ozanam ha abandonado la compañía de su fiel Tentacle Eye (Antoine Carrion) y ha dado un giro por completo con su nuevo compañero: Rica. De una ilustración poética y evocadora ha pasado a un grafismo expresionista y cuidadoso al detalle. Del arte de Rica se pueden decir muchas cosas (para mí, todas buenas) pero, por primera vez, voy a ser fiel a la máxima que versa sobre que "Una imagen vale más que mil palabras", así que deleitaros en este reseña con su arte porque es llamativo como pocos.
Volvamos a la sinopsis...
Un atraco acaba mal...Y los cuatro atracadores tienen que refugiarse en un cementerio de coches y coger de rehén al encargado, José Marchado, un hombre taciturno de vuelta de todo. ¿Podrán escapar a la policía? ¿Podrán salvar a su compinche herido? Y, sobre todo, ¿Podrán llevarle el botín a su jefe, el siniestro Pueblo?
El guión de esta historia de género negro no deja de ser el típico: "Joven promesa del boxeo es coaccionado por jefe mafioso de la ciudad para que en el próximo combate su cara choque contra la lona al tercer asalto. Su familia es amenazada, joven promesa no cumple lo pactado, se ve obligado a huir y mafioso hace efectiva su amenaza. Por último, joven promesa intenta rehacer su vida o, más bien, sobrevivir con los cachos que le quedan de ella". A partir de aquí es donde empieza la trama que nos quiere contar esta vez Ozanam, y lo hace de un modo brillante, aunque breve. Si bien ya se han visto películas que abordan este tema de un modo u otro y que nuestro protagonista, José Marchado, no es muy diferente a otros muchos atormentados por su pasado y orgullo, este cómic tiene ese halo que te hace disfrutar de algo por muchas veces que te lo hayan descrito ya. Tiene ese ingrediente que no podría definir con claridad pero que hace a una historia trillada una BUENA historia trillada. Sus protagonistas tienen personalidad, pero nada original en este manido género negro: el joven psicópata, el futuro líder que busca contentar al jefe para ascender en esta pequeña pirámide alimenticia y la chica que entró en la banda porque no tenía otra forma de ganarse la vida.
Aunque todo en este cómic son típicos estereotipos, Ozanam nos cuenta a lo largo de 64 páginas algo que, por mí, hubiese tenido 200 más. Si os dicen que sacan las próximas navidades una peli de vuestro género favorito, típica en todas sus facetas, con todas esas virtudes y defectos que os encantan, y os prometen a ciencia cierta que os gustará tanto como el último buen recuerdo que guardáis...¿No iríais a verla? ¡Ojo! No digo que lo novedoso no sea un punto a favor, sino que no siempre es necesario para calificar a una historia como buena. Que caiga el que deba no es más que eso: No es un cómic sorprendente si hablamos de guión (el dibujo es espectacular y digno de reseña); no esperéis grandes sorpresas o "giros teatrales", pero es que tampoco busca ser algo que no es; es un thriller muy bien narrado que se ha guiado por aquello de "Lo bueno, si breve, dos veces bueno", lo cual es para mí el único defecto en su conjunto.
Recomendable si te gustan estas historias por infinidad de formas en que te las cuenten y si quieres disfrutar con cada página de un desconocido Rica que hace que te bebas el cómic sin que te des ni cuenta.
¡Un saludo!
