¿Qué tal os va, amigos? Hoy voy a hablaros sobre una de las novedades que nos ha traído ECC este mes, protagonizada por dos de las secundarias de lujo del universo DC: Canario Negro y Zatanna, en una aventura con toques ocultistas, espectros y juramentos con sangre…¡HECHIZO DE SANGRE!
Decidí comprar este cómic por dos razones: Paul Dini y Zatanna. O al revés, que lo mismo da. Soy fan confeso de la hechicera y del guionista, que me parece un tipo realmente fiable en lo que a guionizar cómics se refiere, con una notable habilidad para escribir historias muy bien construidas y que rezuma un profundo respeto por los personajes sobre los que escribe. En esta ocasión, Dini se propone una alianza con el dibujante Joe Quiñones para contarnos una aventura en modo tag team entre Zatanna Zatara, la hechicera que formula sus conjuros pronunciando las palabras al revés; y Dinah Lance, cuyo alter ego es Canario Negro, miembro del grupo superheróico Las Aves de Presa y conocida por poder emplear su torrente de voz como arma de impacto. Con Canario, la expresión “tener un chorro de voz” nunca fue más acertada.
Dini nos cuenta una historia sencilla, divertida y, como suele ser costumbre en él, redonda. Todo comienza con el enfrentamiento entre Canario Negro y Tina Spetro, una delincuente que ha organizado una banda de atracadoras para desvalijar el casino de su ex novio en Las Vegas. La confrontación entre ambas se salda con la -¿voluntaria?- defunción de Spetro, que por medio del conjuro que da nombre a la historia volverá decidida a vengarse de su antigua banda…y de Canario Negro.
En este punto, entra en juego mi hechicera favorita, Zatanna, a la que Canario acudirá para pedir ayuda, pues ella en temas de hechicería y ocultismo, como todos sabemos, no está muy puesta. Todo ello da pie a una vertiginosa y entretenida persecución del ectoplasma vengativo, derivando en un final divertidísimo que deja una satisfactoria sensación de plenitud.
Dini demuestra –una vez más- lo buen guionista que es en una historia que no deja de ser un pretexto para aprovechar su talento y su conocimiento de sus dos protagonistas, ambas con un claro rol secundario en una organización como La Liga de la Justicia, para dejar latente una pregunta: ¿Qué podría pasar si Dini guionizara una serie regular con estas dos heroínas?
La elección de las protagonistas es, de hecho, muy acertada. Canario Negro y Zatanna son complementarias en sí mismas. Así como Canario Negro es una mujer fuerte, hecha a sí misma, confiada y con un punto canalla; Zatanna tiene esa inteligencia enigmática que requiere todo buen mago junto con un punto de ingenuidad e inseguridad que la hacen adorable. Dini sabe lo que se hace y nos cuenta sus primeros encuentros en forma de flashbacks, algo que resulta decisivo para empatizar con ellas y comprobar la fascinante dupla que ambas constituyen, sin descuidar diálogos vivos que resaltan el carisma y el humor entre ambas heroínas.
Dini nos cuenta una historia sencilla, divertida y, como suele ser costumbre en él, redonda. Todo comienza con el enfrentamiento entre Canario Negro y Tina Spetro, una delincuente que ha organizado una banda de atracadoras para desvalijar el casino de su ex novio en Las Vegas. La confrontación entre ambas se salda con la -¿voluntaria?- defunción de Spetro, que por medio del conjuro que da nombre a la historia volverá decidida a vengarse de su antigua banda…y de Canario Negro.
En este punto, entra en juego mi hechicera favorita, Zatanna, a la que Canario acudirá para pedir ayuda, pues ella en temas de hechicería y ocultismo, como todos sabemos, no está muy puesta. Todo ello da pie a una vertiginosa y entretenida persecución del ectoplasma vengativo, derivando en un final divertidísimo que deja una satisfactoria sensación de plenitud.
Dini demuestra –una vez más- lo buen guionista que es en una historia que no deja de ser un pretexto para aprovechar su talento y su conocimiento de sus dos protagonistas, ambas con un claro rol secundario en una organización como La Liga de la Justicia, para dejar latente una pregunta: ¿Qué podría pasar si Dini guionizara una serie regular con estas dos heroínas?
La elección de las protagonistas es, de hecho, muy acertada. Canario Negro y Zatanna son complementarias en sí mismas. Así como Canario Negro es una mujer fuerte, hecha a sí misma, confiada y con un punto canalla; Zatanna tiene esa inteligencia enigmática que requiere todo buen mago junto con un punto de ingenuidad e inseguridad que la hacen adorable. Dini sabe lo que se hace y nos cuenta sus primeros encuentros en forma de flashbacks, algo que resulta decisivo para empatizar con ellas y comprobar la fascinante dupla que ambas constituyen, sin descuidar diálogos vivos que resaltan el carisma y el humor entre ambas heroínas.
Si el trabajo del guionista es sobresaliente, me complace poder añadir que el dibujazo con el que nos deleita Joe Quiñones está al mismo nivel. No tenía el gusto de conocer a este artista y he quedado impresionado por su trabajo en este cómic. Con un trazo limpio, Quiñones exhibe un dibujo muy dinámico y vistoso en el que enfatiza la caracterización de las dos protagonistas, ambas superlativas en lo que a su concepto se refiere. Y aún más, Quiñones demuestra tener muy buena mano a la hora de dibujar secuencias de acción, con algunas viñetas verdaderamente excepcionales –fantástica lucha inicial entre Canario Negro y Tina Spetro, por poner un ejemplo-.
En definitiva, un estupendo cómic que leeréis del tirón por lo amenísimo que resulta desde el principio hasta el final. Si sois fans de alguno de los personajes protagonistas, os encantará. Y si no lo sois aún, no conozco mejor manera de introduciros a ambas heroínas que leyendo esta aventura.
Eso es todo por hoy, amigos. ¡Salud y un buen cómic!
Eso es todo por hoy, amigos. ¡Salud y un buen cómic!