Turno de reseñar las primeras andanzas de este héroe británico que desapareció del mapa durante 20 años...Antes era el "Héroe más grande de Gran Bretaña" y ahora algo le ha hecho volver a escena...¿Preparados para una ración doble de fantasía, ciencia ficción, sarcasmo y acción?
Paul Grist (Kane, Mudman) es un artista inglés considerado por muchos como uno de los "maestros del blanco y negro", y es cierto que el juego que consigue entre estos dos colores es brutal, utilizándolos para dar énfasis a determinados elementos de las viñetas o para crear diferentes atmósferas y sensaciones. Sin embargo, y siento decir esto, pero yo soy un lector predominantemente de tebeos a color y he de decir que, tras ojear el otro día en la Librería el segundo y tercer tomo de este Jack Staff (que son a color), me parecieron tremendamente superiores a nivel gráfico, recordándome los tonos y sombras al estilo de Gabriel Bá en Umbrella Academy (reseñados el primer número, Suite Apocalíptica, AQUÍ, y el segundo, Dallas, AQUÍ).
Jack Staff 1. Todo solía ser blanco y negro recopila todo el material que el propio Paul Grist se autopublicó bajo su sello Dancing Elephant Press (doce números), en el que se nos da a conocer a nuestro héroe y parte de su pasado, a la par que se enfrenta a diferentes casos y villanos y es testigo de otros tantos. Sin duda, Jack Staff no es un superhéroe al uso, pese a que guarde ciertas semejanzas con el Capitán América. Cansado de la vida de héroe, decidió retirarse e intentar llevar una vida normal, pero cuando entra en escena un asesino en serie vampiro se verá obligado a volver a calzarse el traje y echar mano de su "bastón de poder".
Paul Grist usa a su héroe no como cualquier otro de las grandes casas, sino que a través de él y de sus primeras aventuras va creando un universo particular y diferente a cualquier otra cosa que hayais leido, siendo Jack Staff, en algunas aventuras de este recopilatorio, un personaje más o tan solo un rumor.
Uno de los detalles que más me ha llamado la atención del tebeo son algunas composiciones de página de Paul, a medio camino entre un estilo puramente cinematográfico y otro más alocado e incluso surrealista, en el que unas viñetas se superponen a otras y algunas parecen verdaderas "matrioskas de papel". Esto, sumado a un estilo de narración bastante particular de este inglés, cargado de sarcasmo y acidez, hacen de la experiencia de lectura pura diversión; eso sí, una diversión que se hubiese visto acrecentada por mil de haberlo disfrutado a color, en mi opinión (por suerte, tengo los siguientes números para corroborar mi afirmación, así que permaneced atentos).
¡La lectura enriquece el alma!
Pd. Reseña del segundo número: Jack Staff. Soldados (¡a todo color!).
Pd. Reseña del segundo número: Jack Staff. Soldados (¡a todo color!).