Si algo tiene este medio del cómic es su frescura y que por mucho que hayamos leído, de vez en cuando surgen obras capaces de sorprendernos. Copra es una de esas rarezas que pasa desapercibida entre tantas novedades, ¿nos estaremos perdiendo una pequeña joya, o por el contrario solo se queda en una rareza sin fondo?
Lo que está claro es que esta pequeña obra ha conseguido que los círculos más underground del mercado no paren de hablar de ella y la ensalcen como una obra de culto. Pasamos a analizar si realmente es para tanto.
Michael Fiffe es un joven autor que se ha dado a conocer gracias a este Copra, hasta el punto de acabar escribiendo All New Ultimates para Marvel (serie que por cierto no ha recibido muy buenas críticas). La labor realizada en este cómic es tremenda y completa, siendo Michael guionista, dibujante, colorista, rotulista e incluso, durante el primer año, transportista de los ejemplares a una librería de Nueva York (el único sitio físico donde se podía adquirir). Ciertamente este componente artesanal rodea toda la obra y se puede apreciar en cada página y en cada viñeta, consiguiendo un éxito espectacular en EEUU hasta el punto de que el autor sigue sacando números y ya va por el 24.
Pero ¿de qué va Copra? Pues va de un extraño chamán amateur. Una turbadora explosión en una lejana ciudad latinoamericana. Un artefacto de origen desconocido. Un grupo de perdedores sin nada que perder. Ellos son "Copra". Fiffe bebe claramente de títulos sobre grupos peculiares de "Súper Héroes" como La Patrulla Condenada, Escuadrón Suicida o Los Outsiders. De hecho, las similitudes entre el grupo que forma Copra con los miembros del Escuadrón Suicida de Ostrander son más que evidentes, convirtiéndose este en un claro homenaje a aquel.
En cuanto al dibujo, nos encontramos ante uno underground bastante curioso y totalmente acorde con el espíritu de la obra. Estamos ante una obra que tal vez nos pueda recordar a cosas como Pudridero, pero la verdad es que el dibujo de Copra me parece más "bonito" de ver que el de Pudridero y argumentalmente ambas obras son muy diferentes: tanto Pudridero como Copra parten de un enfoque un tanto amateur y con la originalidad como bandera, pero mientras Pudridero se basa en la violencia y en sorprender a través de ella, Copra es un homenaje a las series antes mencionadas y destila amor y respeto hacia las mismas.
En definitiva, todos los que le hemos dado una oportunidad a esta serie hemos caido rendidos ante ella, y recomiendo que le deis una oportunidad a todos aquellos que no la conocíais o dudábais de su calidad. El tomo que nos trae por aquí Inefable Tebeos contiene los tres primeros números de la colección (en una edición bastante bonita) por lo que esperamos que siga trayéndonos esta serie, ya que realmente merece la pena.
