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martes, 31 de mayo de 2016

LA SAGA BARRACUDA, DE JEAN DUFAUX Y JEREMY, PASADA A CUCHILLO POR MISS MONEYPENNY

Una soberbia aristócrata, un joven pirata, un niño capaz de todo para sobrevivir y un misterioso diamante harán temblar todo El Caribe.


Hoy os traigo una reseña global de Barracuda (1-5), dibujada por Jérémy y guionizada por Jean Dufaux (conocido en nuestro país por obras como Murena, Djinn, Rapaces, La balada de las landas perdidas y Sortilegios (Reseña AQUÍ), que promete ser una interesante saga de aventuras de piratas caribeños ¿Estará a la altura?



Lo primero que nos llama la atención es el planteamiento de esta obra; en las primeras páginas Dufaux ya hace toda una declaración de intenciones: “esta es una historia de piratas que transcurre en tierra firme”,  desmarcándose de las aventuras en alta mar a las que estamos acostumbrados.

La historia gira en torno a tres niños totalmente diferentes entre sí, que tienen en sus manos cambiar el devenir de la historia, no solo de Puerto Blanco, sino de todo el mundo conocido: 

  • María de Escuerbo: Es una joven aristócrata española que es abordada junto con su Madre y su criado Emilio en un viaje en alta mar. Su familia parece ser muy influyente dentro de la corte española, propietarios del misterioso diamante Kashar. Desde muy joven demuestra ser fuerte de carácter, sometiendo a todos bajo sus íordenes. Es un carro de tópicos castizos: intensa y pasional, y con una melena morena que ni la Pantoja en sus mejores tiempos.
  • Raffy: El orgullo de todo padre pirata, hábil en el uso de las armas y rudo en las formas, Raffy tiene claro que quiere ser el sucesor de su padre, Blackdog, al mando del Barracuda y se toma muy en serio sus tareas, como la de mantener la mercancía de su padre “pura" para venderla por un buen dinero en el mercado (de esclavos). Se ha de tener un temperamento muy fuerte para ser respetado en un barco pirata y convertirse en su líder, y será ese temperamento el que le meta en más de un problema junto a María.
  • Emilio: Es criado de la familia Escuerbo, es un niño de origen humilde que la madre de María acogió. Al principio, su frágil carácter te hace pensar que no será capaz de sobrevivir en la brutal sociedad de Puerto Blanco, pero demuestra saber adaptarse a sus penosas circunstancias. Es el narrador de la historia.

Como he dicho, alrededor de estos tres jóvenes se vertebra una historia de intrigas, luchas de poder, maldiciones, venganzas, sangre y acero. Aunque ese planteamiento me pareció a priori interesante, me he dado cuenta que los personajes, que se supone que son la gran baza de esta historia de piratas en tierra, cuentan con personalidades muy marcadas y caen en el uso continuado de tópicos, con lo cual la mayoría de las veces sus reacciones resultan muy predecibles.

Resulta interesante ver como a medida que avanza la historia los tres protagonistas pasan de la niñez/adolescencia a la madurez, como se relacionan entre ellos y con la sociedad caribeña y los peligros que esta entraña, comprendiendo el porqué de sus actos y que estos van a tener grandes repercusiones en su futuro y en el destino de la isla de Puerto Blanco,  que parece vivir a 24 horas del caos total.


(MODO SPOILER ON)

Es en este momento cuando nosotros solo teníamos que sentarnos y disfrutar de las aventuras de María, Raffy y Emilio, pero Dufaux decide pegar un vuelco, situando la acción en un lugar completamente distinto y teniendo como protagonista absoluto a un personaje hasta el momento secundario. En el Capitulo 5, titulado Caníbales, dejamos un Puerto Blanco a punto de estallar para centrarnos en otro misterio de la trama, el enigmático diamante kashar

Mi sensación al leer este tomo fue de confusión total. Después de tocar el tema del diamante de puntillas durante prácticamente toda la obra, nos trae un tomo donde los protagonistas quedan totalmente relegados a segundo plano en pos de la dichosa piedra (preciosa). Me resulta extraño que a un número del final, el guionista emplee un álbum entero a hablarnos de un misterio que prácticamente desde el primer tomo era totalmente secundario y que podría haberse explicado con unos flashbacks bien utilizados. 

Esto me hace pensar que vamos a tener un último tomo apresurado en cuanto a los acontecimientos, donde, a raíz de la portada, todo parece indicar que la entrada en juego de un antiguo pirata va a eclipsar de nuevo a los protagonistas.

(MODO SPOILER OFF)


Pasemos a hablar del dibujo, a cargo del entonces debutante Jérémy (con clarísimas referencias artísticas del desaparecido Philippe Delaby), que hace un buen trabajo a lo largo de la obra, tal vez algo más tosco en los primeros álbumes, donde parece tener algunos problemas con la expresividad facial, pero siempre acompañado de un color con acuarela que demuestra una labor titánica por parte del ilustrador.

Continuando con el apartado gráfico, me parece importante señalar a modo de anécdota algo que me ha sorprendido durante todo el cómic, y es que desde el principio los personajes ¡no se han cambiado de ropa! Seguro que os estáis riendo ahora mismo, pero pensadlo, pasan AÑOS en Puerto Blanco y la ropa siempre es la misma, es algo que no ayuda nada a situarte cronológicamente. De hecho, la pobre María tiene la ropa hecha jirones en el último álbum; por fin tendrá un vestido nuevo, pero os aseguro que será ROJO, porque parece que no hay telas de otro color en toda la isla. Lo dicho, es una tontería, pero creo que es algo a tener muy en cuenta a la hora de diseñar personajes.

Llegados al final de esta reseña, la sensación que tengo después de haber leído 5 de los 6 números de compondrán la historia es de decepción. Me parece que el guionista ha tenido problemas para conjugar los dos puntos clave de la obra: por un lado, la evolución de los tres niños protagonistas en un entorno tan brutal como es una isla pirata, donde impera la ley del más fuerte y el misterio del diamante Kashar, deteniéndose mucho en el primer punto en detrimento del segundo, que no termina de desarrollarse lo suficiente, quedándose en el “quiero y no puedo”.


Por último, os dejo la portada del último número de la serie (sexto), dedicada por completo al Halcón Rojo, algo que de nuevo me vuelve a descolocar; me parece imposible que la portada del último número esté dedicada a un personaje que sale dos veces en toda la serie y es por la referencia que otros hacen a él, cuando a María, que es un personaje esencial, no le ha dedicado ninguna (para quien no lo sepa, en Francia existen ediciones especiales en las que salen todos los personajes, incluida la prostituta Llamarada).


SIN PIEDAD, PARA NADIE, NUNCA.

Muchas gracias por leerme.

Miss Moneypenny.