Este cómic dió mucho de que hablar cuando salió hace unos meses, y estoy seguro que te hartaste de leer por la Red maravillas sobre él. Autores, blogueros, editores, fans... todos ellos lo pusieron por las nubes por el tono que gastaba, pero... ¿merece tu amor?
Leñadoras es un cómic juvenil, desenfadado, como salido de la mente de algún creativo del Cartoon Network de El laboratorio de Dexter y alocadamente divertido. Si con esto tu mente te ha enviado un mensaje diciéndote "Tiene que ser mío", hazlo, no te vas a arrepentir. Pero, si por el contrario, lo que te ha dicho tu cerebro es algo más parecido a "En este momento busco algo más serio/adulto", hazle caso también. No lo compres, TODAVÍA.
Este cómic nos pone en la piel de cinco amigas de campamento de verano y sus aventuras; aventuras que, pese a empezar como una lista de "inocentes" travesuras, terminan por convertirse en toda una serie de pesquisas para averiguar el origen de unos extraños y paranormales sucesos que acontecen en el campamento y sus alrededores.
La línea que sigue este Leñadoras es una basada casi única y exclusivamente en la caricatura, sarcasmo y el divertimento. El tono, acompañado de esa estética de dibujitos animados, es lo que casi nos empuja desde las primeras páginas a sentir que nos acabamos de adentrar en un capítulo de la mítica Cartoon Network, con sus sinsentidos, la hiperactividad de sus personajes, sus cómicos trastornos y un desarrollo de la trama sorprendente, a la vez que explosivo.
Si quieres pasar un buen rato, ¡ve a por él!
La lectura enriquece el alma,