¿TE APETECE VIAJAR POR TODO EL MUNDO JUNTO CON EL CIRQUE DE LA LUNE? ¡PUES ESTÁS DE SUERTE! PODRÁS VIVIR MUCHAS AVENTURAS JUNTO CON LILA Y SU GRAN FAMILIA EN EL CAMINO, ¡NO TE LO PIERDAS!
¡Muy buenos días!
Hace poco pude leer, al fin, el cómic de Lila Trotamundos, de Teresa Radice y Stefano Turconi. Lo cierto es que no es el primer cómic de ambos que tengo la oportunidad de leer, ya que reseñé El Puerto Prohibido hace unos meses (puedes ver la reseña AQUÍ).
Stefano Turconi es un dibujante e historietista. Estudió arte en diversas formaciones académicas, siendo incluso alumno de Alessandro Barbucci (dibujante de cómics como Ekhö). Ha trabajado para Disney haciendo cómics de Minnie y Mickey. Ha fundado junto a Giovanni Gualdoni el Studio Settemondi, creando así “Akameshi”, “Fantaghenna”, o “Wondercity”. Por otro lado, Teresa Radice estudió idiomas y realizó varios cursos de escritura narrativa. Siguiendo esos pasos, trabajó para publicaciones como W.I.T.C.H y X-Mickey. Además, Stefano y Teresa crearon “Pippo Reporter”, que sigue publicándose en la actualidad.
Hace poco pude leer, al fin, el cómic de Lila Trotamundos, de Teresa Radice y Stefano Turconi. Lo cierto es que no es el primer cómic de ambos que tengo la oportunidad de leer, ya que reseñé El Puerto Prohibido hace unos meses (puedes ver la reseña AQUÍ).
Stefano Turconi es un dibujante e historietista. Estudió arte en diversas formaciones académicas, siendo incluso alumno de Alessandro Barbucci (dibujante de cómics como Ekhö). Ha trabajado para Disney haciendo cómics de Minnie y Mickey. Ha fundado junto a Giovanni Gualdoni el Studio Settemondi, creando así “Akameshi”, “Fantaghenna”, o “Wondercity”. Por otro lado, Teresa Radice estudió idiomas y realizó varios cursos de escritura narrativa. Siguiendo esos pasos, trabajó para publicaciones como W.I.T.C.H y X-Mickey. Además, Stefano y Teresa crearon “Pippo Reporter”, que sigue publicándose en la actualidad.
Esta vez nos traen la historia de Lila Vermeer, una joven risueña y curiosa que forma parte de un gran circo: Le Cirque de la Lune. Hija del Profesor Vermeer, un entomólogo que a su vez es domador de insectos, y de la importante y famosa mujer bala. Sin embargo, y a pesar de que hay muchos personajes, ¡todos se sienten una gran familia! El cómic está dividido en tres capítulos, y en cada uno nos narra una aventura en diferentes partes del mundo. Comenzamos visitando París, donde tiene la oportunidad de conocer al pintor Henri de Toulouse´Lautrec, que le enseñará a apreciar el arte. Después hacemos una parada en Canadá, donde conocerá al compositor Antonín Dvorak, que busca inspiración, y a un nativo americano con un gran talento oculto. Por último terminamos la aventura (de momento) en el Himalaya, donde el viaje que se realiza es casi espiritual; una vuelta a las raíces. En cada gran aventura, Lila, sus amigos y familiares aprenderán una nueva lección de vida.
Los personajes, como menciono anteriormente, ¡son un montón! Sin embargo, es admirable cómo cada uno desprende una personalidad y una simpatía bien diferenciadas. Podemos encontrar personajes que aparecen en tan solo un capítulo, y otros que se mantienen a lo largo del libro. ¡Todos ellos son fantásticos! La narración de las viñetas es maravillosa, y los colores y el tipo de dibujo espectaculares; lleno de matices, colores que vibran y el trazo del lápiz que le da un aspecto juvenil al cómic. La narración, por otro lado, es fantástica, e incluso incluye citas y fragmentos literarios. ¡Gracias a esta combinación de elementos, nos llega el mensaje y podemos sentir muchas sensaciones al leer el cómic!
En definitiva, nos encontramos ante otra joya (¡para todo tipo de públicos!) que hay que tener entre nuestras manos para disfrutar de la lectura. Como ya hicieron en El Puerto Prohibido, mantienen las alusiones a la cultura, ¡lo que es admirable!. De nuevo muchas gracias a ambos autores, ya que saben cómo transmitir emociones y hacernos partícipes de su historia. ¡Estamos des
Me despido hasta el siguiente, ¡espero que lo disfrutéis!
“La belleza, sin duda no crea revoluciones… ¡Pero llegará el día en que las revoluciones necesiten belleza!”
